Todo está listo para el 28 de marzo. Ese día, judios, cristianos y musulmanes se pondrán de acuerdo: todos odiarán a Homer Simpson. Con un enemigo común, es más fácil firmar la paz en Oriente Medio.
Estamos hablando de un nuevo episodio de la 21 temporada de los Simpsons que se estrenará en esa fecha en Estados Unidos, con el título «La historia más grande jamás contada«.
El nuevo capítulo de la familia amarilla más famosa de América nos muestra a Homer, Marge, Lisa, Bart y Maggie de vacaciones en Israel. Allí, el gran Homer padecerá el «síndrome de Jerusalem» -soy el Mesías- y compartirá protagonismo con un guía turístico israelí cuya voz pertenece al actor británico Sascha Baron Cohen, famoso por sus interpretaciones de Borat y Bruno.
Sin embargo, la realidad es más triste y tozuda. El desencuentro entre Estados Unidos e Israel por la crisis de los asentamientos bloquea cualquier avance en favor de la paz. La reunión hoy en Moscú del Cuarteto de Madrid no ofrece, a primera vista, muchas soluciones.
Visto lo visto, tendremos que agarrarnos a las palabras de Al Jean, productor de la serie: «En este episodio los creyentes de las tres religiones serán igualmente ofendidos».
Sabiendo que en el tablero de Oriente Próximo siempre ganan los extremistas, ahora, más que nunca, es necesario buscar un enemigo común. Homer Simpson es el objetivo y el día 28, una fecha para la paz.